ISSN: 1139-8736 Depósito Legal: B-39199-99 |
3.1.7. EL ADVERBIO
La gramática tradicional define la clase gramatical adverbio como aquella que acompaña al verbo, al adjetivo o a otro adverbio para modificar o precisar su sentido1. Morfológicamente se suele clasificar como invariable.
El adverbio ha constituido, desde las primeras clasificaciones gramaticales, una categoría independiente que ha actuado muchas veces como "cajón de sastre" con una carencia delimitadora clara frente a otros tipos de palabras, invariables también, como podían ser la preposición y la conjunción.
En la Techné Grammatiké de Dionisio de Tracia "epirrema o adverbio" significa literalmente "adición al rema" y designa la parte de la oración sin flexión que se une al verbo y lo modifica. Frente a él se diferencia una clase para las preposiciones y otra para las conjunciones.
En el sistema de Varrón, sin embargo, el adverbio no se halla diferenciado de la clase de las partículas (preposición y conjunción) y se caracterizan de manera conjunta por la carencia de flexión de caso y tiempo.
En el resto de los sistemas de la tradición gramatical occidental y en los más ligados a nuestra lengua el adverbio se ha constituido como clase independiente aunque la transcategorización entre éste y la clase de las preposiciones y las conjunciones es un hecho señalado por todos nuestros gramáticos.
En un sistema de codificación como el nuestro esta carencia de criterios delimitadores claros para la categoría adverbio se traduce en una dificultad para reconocer y etiquetar como tal las palabras que pertenecen a esta clase y en la necesidad de establecer los criterios de desambiguación para los casos de transcategorización.
Las clases
La categoría gramatical de adverbio ha sido y es objeto de variadas clasificaciones , todas o, la mayor parte de ellas, complementarias y elaboradas desde distintos puntos de vista. Algunas de ellas se han basado en la forma (se distinguen los que podríamos llamar primitivos de los que se derivan de adjetivos, las locuciones o frases adverbializadas, por citar algunos tipos).
Otras parten de un criterio de significación y distingue entre los pronombres-adverbio caracterizados por significado ocasional frente a los conceptuales con significado propio.
Junto a éstas, la más utilizada tradicionalmente es la basada en un criterio puramente semántico que distingue adverbios de lugar, tiempo, modo, cantidad, afirmación, negación y duda.
Los sistemas de codificación actualmente existentes reflejan clases muy distintas y, en muchos casos, se crean membretes para determinadas formas con un comportamiento sintáctico peculiar o distintivo que no reflejan la pertenencia a la categoría gramatical adverbio. Todos los corpus ingleses, por ejemplo, distinguen dos membretes específicos (sin ningún vínculo con la categoría gramatical "adverbio") para el existencial "there" y el adverbio de negación "no".
TEI AI 1W2 adopta la clasificación tradicional de tipo semántico aunque ésta no se llega a sistematizar en el documento de Langedoen y Fahmy.
NERC señala que, ante la actual disparidad de clasificaciones y de membretes para la clase adverbio en los corpus actuales, un intento inicial o primero de estandarización morfosintáctica debe prescindir de una clasificación en tipos.
EAGLES señala únicamente el rasgo de grado entre los morfosintácticos. Como específico de aplicaciones, hace un intento de división en tipos basado en primer lugar en la distinción "aderbios generales" vs. "adverbios de grado" ("very", "so", "too") estos últimos con una función sintáctica específica. En segundo lugar "polaridad" distingue "adverbios wh" de "adverbios no wh". En tercer y último lugar, dentro de los wh se establecen las clases interrogativos, relativos y exclamativos.
El grado es el único rasgo que hemos adoptado en nuestra propuesta de codificación. La posibilidad o no de tener grado (grado no-aplicable=0) permite la separación entre los adverbios que Alcina y Blecua llaman cualificativos2 y el resto.
Sin haber llegado a profundizar en est tema, pensamos que cualquier codificación del adverbio que se pueda establecer a partir de la exclusivamente morfológica que hemos adoptado debe tener en cuenta la funcionalidad del adverbio; su capacidad para modificar a verbos, adjetivos, adverbios u oraciones. Al conjunto de estas categorías (adverbios en mente) o a algunas de ellas.
Este tipo de clasificación es quizás de las más dependientes de la lengua objeto de análisis entre cuantas puedan surgir a partir de esta tesis. Este hecho junto a la base estrictamente funcional de la que parte es seguramente la razón de que ninguna propuesta de estandarización haya llegado a tratar este tipo de clasificación.
Este tipo de clasificación, finalmente, llegaría a tener en muchas ocasiones membretes exclusivamente para una única forma (como hemos dicho más arriba los membretes "únicos" de los corpus ingleses se refieren la mayor parte de las veces a la categoría adverbio).
Codificación | |
GRADO | |
POSITIVO | |
COMPARATIVO | |
SUPERLATIVO |
Con la eliminación del rasgo tipo para la categoría adverbio, los rasgos morfológicos que podemos codificar se reducen a los valores correspondientes al rasgo grado.
Efectivamente el grado es la única alteración morfológica que puede sufrir la clase de los adverbios.
La gradación es un rasgo morfológico que poseen únicamente los adverbios con contenido léxico propio y no los llamados pronominales.
Con el fin de mantener la coherencia con la codificación de este rasgo en la clase adjetivo, codificaremos como comparativo las formas mejor y peor y la forma mayormente. Como superlativos se recogerán las formas que contengan el sufijo "ísimo/a" y "érrimo/a" y aquéllas que contengan estos mismos sufijos más el sufijo derivativo "mente".
Asignación de membretes dobles | |
Adjetivo/adverbio | Adverbio/preposición |
Adverbio/conjunción | |
Adjetivo/adverbio | |
Cf. 3.1.4. | |
Adverbio/preposición |
La relación entre adverbio y preposición y conjunción es muy estrecha en algunas lenguas como el español. Los adverbios españoles delante, enfrente, dentro, antes, después,... pueden funcionar como preposiciones añadiéndoles la preposición "de". Algunas de estas uniones (llamadas "locuciones prepositivas") son casi del todo equivalentes a preposiciones simples: delante de ="ante", encima de = "sobre", debajo de = "bajo", ...
En este caso nuestra manera de actuar consistirá en la consideración de estas formas complejas como locuciones prepositivas y su tratamiento será igual al señalado en el caso de las adverbiales.
Otra cuestión relacionada más bien con la adscripción de formas a la categoría adverbio o a la categoría preposición es la relacionada con los adverbios llamados prepositivos ("calles arriba", "río abajo", "mar adentro"). Nuestras gramáticas fluctúan entre la adscripción de estas formas a la categoría adverbio sin más, dentro de esta categoría su consideración como locuciones adverbiales o su adscripción a la clase adposición tipo posposición.
Nuestra propuesta de codificación las considerará locuciones adverbiales. Efectivamente, arriba, abajo o adentro no modifican al sustantivo al que preceden sino que más bien forman parte de un todo (locución) que desarrolla una función típicamente adverbial como es la de modificador de un verbo. No obstante, como tendremos ocasión de ver más adelante, la codificación de la categoría adposición prevé la distinción en tipos (preposición o posposición) que permitiría, si así lo aconsejase la práctica de codificación, la codificación de estas formas como posposiciones.
Adverbio/conjunción
Algunos adverbios (luego, ya,...) actúan como conjunciones coordinadas. En estos casos mantendremos la codificación de una y otra categoría a partir de los contextos o distribuciones de éstos.
Las formas prepositivas formadas a partir de algunos de los adverbios primeros (antes, después) más la preposición "de" se convierte en conjunciones añadiendo que (antes de que, después de que. En nuestro sistema de codificación consideraremos estas formas "locuciones conjuntivas" y el tratamiento será el correspondiente a las locuciones que acabamos de indicar.
Membretes específicos
Locuciones adverbiales
Como veíamos en el punto 3.1.0., una locución es, en general, un grupo de palabras cuya sintaxis particular les confiere el carácter de grupo estereotipado que corresponde a una única palabra. En la categoría adverbios es donde estas locuciones son más numerosas y se dan con más frecuencia, entre éstas tenemos las formas: tal vez, a menudo, de acá para allá, poco a poco, con mucho, por poco, ante todo,...
La práctica que adoptaremos en nuestro sistema de codificación es la que se expone en el punto ocho de los principios de codificación: asignación de un membrete adverbio (correspondiente al conjunto) a la última palabra de la locución adverbial.
NOTAS
1 Junto a estas categorías, se ha señalado posteriormente, la modificación del sustantivo (muy niño, todavía niño, la no asistencia...) o la frase (afortunadamente, todo salió bien).
2 En su caracterización, Alcina y Blecua señalan su capacidad para expresar circunstancias de términos secundarios (verbo o adjetivo), morfológicamente o neutralizan sus morfemas concordantes o en muy pocos casos inflexionan el lexema o no seleccionan morfemas de género y número y, por último, funcionalmente se agrupan con verbos, adjetivos o adverbios.
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