2.2. Comparación y modalidad y comparación e hipótesis
Cuando procedemos a analizar un texto, obtenemos una serie de proposiciones, constituidas, cada una, por un sujeto (argumento) y un predicado (función). A continuación, podemos intentar especificar la naturaleza de los predicados y así establecer la oposición estática/dinámica. Podemos también explorar las relaciones entre proposiciones, tomadas de dos en dos y, más concretamente, entre predicados: descubriremos que éstos poseen a menudo elementos comunes y que por lo tanto pueden considerarse transformaciones uno del otro.
La transformación de modo se caracteriza por ser la más común ya que especifica la manera o modo en que se desarrolla la acción. Generalmente, la lengua se sirve de adverbios de intensidad y éstos también se encuentran en las formas superlativas y comparativas.
Valga esta pequeña introducción para explicar dónde radica la fluctuación entre las estructuras comparativas y las estructuras modales. Gili Gaya (1961) establece tres tipos de subordinadas a este respecto: las comparativas, las modales y las comparativas de modo. La mayoría de los gramáticos basan su diferenciación en las comparativas de igualdad dependiendo de que el marcador tan esté presente o no en la frase. Proponemos un acercamiento distinto: partiendo de la base de que en toda comparación hay implícita una modalidad, ¿por qué no intentar acercar estas comparativas de igualdad a las comparativas hipotéticas introducidas por "como si"?
Observamos que este tipo de reconstrucción sólo es posible cuando la comparación es de tipo X(n) @ Y(n). La comparación no puede referirse exclusivamente a X:
Juan tiene casas como coches.
puesto que un ejemplo de este tipo presenta varios inconvenientes: si suprimimos el intensivo tantas, la interpretación es de tipo N0 tener N1, donde N1 está representado por casas como coches, es decir, casas que parecen coches. Es más, la supresión del intensivo, no especifica la naturaleza de éste, puesto que puede ser de tipo:
En el caso de una comparación de tipo X(n)@ Y(n), el intensivo tan(to) no es necesario:
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