Estudios de Lingüística del Español (ELiEs) |
Cortesía y descortesía: teoría y praxis de un sistema de significación / Alexandra Álvarez Muro |
6. Estructuras de la cortesía
Mi abuelo viene a buscarme (buenmozo y rapado como
siempre), con su gran bastón de empuñadura de lata y
repartiendo los saludos más corteses de la ciudad. Señoras que
salen de la Misa Mayor, canónigos exuberantes que van a
desayunarse después de rezados los oficios matinales,
empleados del Gobierno o gentes que llegan de los pueblos
vecinos en sus mulitas moras o en sus caballos de paso a las
negociaciones semanales, reciben de mi abuelo las
salutaciones más plácidas. A todos los conoce y para todos
saca de su nutrido vocabulario fórmulas de perfecta cortesía.
Mariano Picón Salas. Viaje al amanecer
El sistema de la cortesía se compone de una serie de acciones rituales, porque se considera la imagen como algo sagrado, y de un conjunto de rutinas, recurrentes y repetitivas que parecen vacías de contenido, pero que no lo son en su finalidad80. Los rituales no parecen solo cuestión de humanos; veamos el siguiente ritual, descrito en una entrevista recopilada por Clarac de Briceño (Corpus de Habla Rural):
Estamos en abril. Esos zamuros van a cambiar pico y plumas en el páramo de Niquitao, allá por los lados de Trujillo. Deben encontrarse allá el Viernes Santo a las tres de la tarde, a la misma hora en que murió Nuestro Señor. Se juntan con los otros zamuros que habrán venido del Llano o de la costa, eligen sus reyes, y se separan hasta el otro Viernes Santo.
Muchas veces reducimos la cortesía a la expresión de ciertas formas específicas; ¿cómo se dice? le preguntamos a los niños en sus primeras lecciones de cortesía, para que reconozcan la necesidad de aprender fórmulas como por favor, ay mamita, mi amor, según el dialecto que manejan. Algunas teorías consideran, en efecto, la cortesía como habla premodelada (prepatterned speech), oponiéndose a las versiones funcionalistas. A lo largo de estas páginas, hemos visto cómo la cortesía trasciende estas fórmulas, porque ellas están solo en la corteza de lo que abarca este sistema que nos hace personas y nos concede libertad en sociedad.
Teniendo en cuenta que el estudio exclusivo del uso no nos daría el panorama completo sobre la cortesía, revisaremos ahora las estructuras recurrentes que se presentan en el juego cortés. Ellas tampoco completan la totalidad del uso en este topos, pero nos interesan sobre todo porque popularmente se dan como sinónimo de cortesía, de modo que cuando le pedíamos a amigos y conocidos una definición de cortesía, nos respondían dar los buenos días, saludar. También son importantes estas estructuras porque su carácter repetitivo las hace apelar al afecto en la comunicación, otra razón por la cual son instrumentos clave de la cortesía. Asimismo, porque son reveladoras para el estudio de lo poético en lo cotidiano: los hablantes se esmeran en la construcción del texto y en el logro de un producto estéticamente atractivo.
Revisaremos en este capítulo las estructuras significativas más compactas, en las rutinas y los despliegues simbólicos más amplios, tanto en su configuración como por los recursos que implementan, en los rituales. Limitaremos nuestro análisis sobre todo a lo lingüístico, aun cuando somos conscientes de que ni las rutinas ni los rituales se quedan en las palabras.
Notas
80 Ver el capítulo de Estrategias, sobre las rutinas y rituales.Estudios de Lingüística del Español (ELiEs), vol. 25 (2007) | ISSN: 1139-8736 |