Estudios de Lingüística del Español (ELiEs)
El documento hipertexto en el discurso de transmisión de conocimientos / Arlette Séré


2.5 El cambio en la relación de los sujetos respecto al saber y al aprendizaje

Si el análisis del número y de las relaciones entre los sujetos ya era complejo en la situación de uso en un método de idiomas en clase, en el caso del hipertexto lo es mucho más. Los métodos en papel ya suponían la existencia de enunciadores y co-enunciadores múltiples, visibles en su presentación en obras separadas -libro del alumno y del profesor, cuaderno de ejercicios, grabaciones-; todas estas actividades estaban concebidas teniendo en cuenta la mediación del profesor, sujeto real, decisorio y conductor de la situación de enseñanza presencial.

En el caso del documento hipertexto de transmisión de conocimientos, podemos encontrarnos, aparentemente, en una situación similar a la del escrito cuando se trata de documentos informatizados que sustituyen al papel, como, por ejemplo, las enciclopedias o los diccionarios informatizados, ya que, en muchos casos, si la manipulación de datos se encuentra modificada por el nuevo soporte, la situación de lectura casi no varía en cuanto a la relación de los sujetos. El documento hipertexto, sin embargo, sirve, cada vez más directamente, de soporte a aprendizajes autónomos o semiautónomos, concebidos para ser utilizados fuera de la situación de clase propiamente dicha en donde el profesor no está físicamente presente.

En las situaciones de aprendizaje autónomo o semiautónomo, el documento hipertexto se presenta como un conjunto de documentos electrónicos plurales de naturaleza diversa: 1) reformulación en forma de síntesis realizada por un experto -por ejemplo, el mismo profesor de la clase-, 2) definiciones sacadas de un diccionario, o bien 3) ilustraciones y textos de autores. Las voces que se suceden en la pantalla, que exponen o explican el saber, son heterogéneas y múltiples; espacialmente pueden presentarse conjuntamente o sucesivamente, pero son siempre semióticamente de fácil identificación, por ejemplo, por medio de cambios de códigos gráficos que sirven de marcas específicas y ocupan el espacio de la pantalla en un principio de superposición creando, en un momento dado, un espacio de comunicación particular. Hay que añadir, además, a esta situación plural de autores enunciadores en superposición, los autores y las marcas de todos los marcos mostrados por debajo, que ya hemos mencionado, y que siempre están presentes en la pantalla: 1) los del sistema que rigen el uso de los ordenadores y 2) los de los programas que determinan y limitan las diferentes funciones y operaciones. La pantalla unifica las diferentes voces convirtiéndose en el verdadero co-enunciador de la situación de enunciación como portador de los contenidos del marco-documento mostrado, resultado de la actividad del aprendiente-usuario, que no es el autor, sino el constructor y reconstructor incansable de su aprendizaje.

Todas las técnicas que derivan del uso del conjunto de estos diferentes marcos van acompañados por interfaces de los distintos conceptores que se dirigen directamente al usuario y actualizan intercambios comunicacionales que se encadenan, dándole una impresión de continuidad, al mismo tiempo que lo integran en una comunidad discursiva que percibe generalmente como homogénea. Sin embargo, no hay que olvidar que estas múltiples interacciones ejercen continuas constricciones respecto a lo que llamamos la autonomización del aprendizaje, ya que la actividad de los aprendientes se define a partir de los programas utilizados y, éstos, a su vez, limitan metodológicamente, del mismo modo, a los conceptores de las actividades propuestas y a la elección de contenidos que hay que transmitir.

A pesar de todas estas constricciones y restricciones, el soporte electrónico abre horizontes interesantes para una nueva concepción del discurso de transmisión de conocimientos, otorgándole una eficacia y una movilidad que no podría tener en el marco cerrado de las obras publicadas y fechadas, así como en la limitación del número de páginas de las obras en papel.





Estudios de Lingüística del Español (ELiEs), vol. 24 (2006)   
 ISSN: 1139-8736