Estudios de Lingüística del Español (ELiEs)
Re(d)escritos: prensa, teatro, novelas digitales… / Elena Carpi


1. Internet, espejo de la realidad

La reflexión socio-filosófica1 llevada a cabo en los últimos años acerca de la tecnología digital se basa en una interpretación de la Red como “nuevo entorno” (Echeverría Ezponda, 1999) en el que se actúa y toman decisiones. Se compara el ciberespacio con ambientes físicos, como el campo y la ciudad, atribuyéndole calidades tangibles y se establecen paralelismos entre las civilizaciones campesina, urbana y la digital, que sólo puede resultar chocante si se acepta, sin vacilaciones, la descripción dicotómica de Internet por el contraste virtual/real. Dicha oposición, que podría ser cierta en los comienzos de la historia de la “Galaxia Internet” (Castells, 2001)2, no refleja con exactitud el significado de los intercambios que se producen en el espacio digital. La entrada del adjetivo 'virtual' (DRAE, 2001): 'Que tiene virtud para producir un efecto, aunque no lo produce de presente', describe de manera incompleta las consecuencias que las interacciones virtuales están produciendo en la manera de pensar, vivir y hablar de las personas en el mundo occidental. Una definición más ajustada de su significado referido al ciberespacio3 tendría que hacer hincapié en el acusado sentido de potencialidad ya presente en su etimología. Como recuerda Lévy (1998, p. 13):

“La palabra virtual proviene del latín medieval virtualis, derivado, a su vez, de virtus, fuerza, potencia. En la filosofía escolástica, es virtual aquello que existe en potencia y no en acto. Lo virtual tiende a actualizarse, sin que por ello pase a la concretización efectiva o formal. [...] En rigor filosófico, lo virtual no se opone a lo real sino a lo actual: virtualidad y actualidad son únicamente dos modos de ser diferentes”.

Internet, siendo una creación que tiene límites físicos, hecho que a menudo los mitos de omnipotencia que acompañan la Red permiten olvidar4, es un espejo del mundo concreto y no contiene nada que no exista en la actualidad: es un producto de la tecnología5 y, como tal, ni buena ni mala. Sin embargo, posee características propias, capaces de modificar la manera de acceder a los contenidos, de proponerlos y de utilizarlos. Dichas calidades llegan a producir efectos porque influyen sobre la relación de los usuarios con las informaciones: si la forma de actuar e interactuar cambia, la manera de pensar y de hablar, y todo lo que integra la base material6 del lenguaje, va inevitablemente a transformarse.




Notas

1 Cf. Lévy (1994) y (2002).
2 Para mayor información acerca del desarrollo histórico de la Red, ibidem.
3 Así denomina el DRAE (2001) s.v. 'realidad' , la 'realidad virtual': 'Representación de escenas o imágenes de objetos producida por un sistema informático, que da la sensación de su existencia real'.
4 Cf. Marcos Marín (2001).
5 En el sentido metonímico de técnica. Cf. Albadalejo (2001, pp. 9).
6 Cf. Scurati (1999).





Estudios de Lingüística del Español (ELiEs), vol. 24 (2006)   
 ISSN: 1139-8736