| ISSN: 1139-8736 |
3. La organización modular
En nuestros trabajos sobre las relaciones entre lingüística e informática optamos por un planteamiento modular14. De manera general, una metodología modular defiende un modelo teórico que presupone un determinado número de subsistemas autónomos o módulos y cada uno de ellos trata de un aspecto específico, pudiendo ser entendido como una teoría parcial, con su organización de reglas y con aplicaciones propias; en consecuencia, cada tipo de fenómenos puede ser definido y analizado con independencia de los otros. Los diferentes módulos están relacionados entre sí por un sistema de reglas globales o metarreglas, pero la concepción global prima siempre sobre la local. Teniendo en cuenta estos principios, la hipótesis genérica que rige nuestros trabajos es doble: por una parte, hay una relativa independencia de cada uno de los módulos didácticos y, por otra, existe una estrecha interconexión entre todos ellos, es decir, cada módulo está relacionado con los demás, es accesible desde cualquiera de ellos -- organización de tipo hipertextual -- y, asimismo, todos tienen una función en el sistema -- organización intratextual -- .
La estructuración en módulos pone de manifiesto las hipótesis emitidas sobre los procesos de comprensión textual en lengua extranjera y se organiza a partir de la noción de legibilidad (López Alonso & Séré: 2001:103-221), concepto nuclear en la actividad del lector y en su manera de aprehender el texto como una continuidad discontinua.
Voy a referirme brevemente a las tres relaciones que se plantean en la didáctica de la comprensión y a su estructura modular en el texto electrónico.
Notas
14 Las teorías sobre la modularidad comparten el principio de que cada módulo es relativamente autónomo, con sus principios y reglas y, a su vez, interactúan unos con otros y se alimentan mutumente. La gramática generativa de Chomsky (1982), los presupuestos de J.A. Fodor (1983) y la gramática funcional de Dik (1989) proponen una estructura modular rigurosa de la lengua y se concentran estos estudios en el nivel sintáctico. Las gramáticas sistémicas, inspiradas de los trabajos de M.A.K. Halliday (1970), defienden una modularidad de carácter global, aunque con enfoques muy diferentes, ya sea una modularidad que se concentra en el uso (Morley, 1985), en el acto de enunciación (Lang&Pasch, 1984), un acercamiento componencial ( Verschueren, 1987) o perspectival, en la línea de H. Nolke (1994); este último autor defiende una interdependencia estrecha entre lengua y realidad pero, a su vez, postula que hay fenómenos propiamente lingüísticos. Desde un enfoque discursivo, E. Roulet (1991, 2000) propone un acercamiento modular en el que entran a formar parte las dimensiones jerárquica, argumentativa, polifónica, tópica, inferencial e interaccional del discurso.Volumen 23 (2006) ISSN: 1139-8736 |