Actas del II Congreso de la Región Noroeste de Europa de la Asociación de Lingüística y Filología de América Latina (ALFAL)


11.7.2 Matrimonios y usos duales

Hay conjuntos de dos personas, una masculina y otra femenina, tipo matrimonio. En nuestra cultura, el matrimonio tradicional se compone de un hombre y una mujer, el marido y su mujer o la mujer y su marido, interpretación dual. La introducción de un matrimonio en el discurso implica la introducción de dos personas de distinto sexo, un hombre y una mujer. Por tanto, una vez introducido en el discurso un matrimonio, se sabe a quién refiere él y a quién refiere ella. En el ejemplo siguiente, (22), se sabe la identidad de los miembros del matrimonio ya que se especifica el sexo:

(22) Acaba de entrar un matrimonio, muy contento él y muy furiosa ella

La interpretación se compone de algunos pasos interpretativos: el matrimonio es una pareja de marido y mujer, de modo que la entrada del matrimonio es la entrada de marido y mujer, muy contento el marido y muy furiosa la mujer.

La forma plural del nombre masculino de parentesco se usa en algunos casos con valor dual, para denotar matrimonios: padres, tíos, abuelos. Otros usos duales se observan en casos como los Reyes Católicos y, a veces, los vecinos.

Nótese que un nombre masculino plural de parentesco como tíos tiene tres interpretaciones referencialmente distintos: (i) un matrimonio de tio y tía; (ii) personas masculinas y/o femeninas con relación de parentesco "tío" o "tía"; (iii) personas de sexo masculino con relación de parentesco "tío". En otras lenguas, como el holandés, hay tres expresiones distintas: (i) oom en tante ("tío y tía") ; (ii) ooms en tantes ("tíos y tías"); (iii) ooms ("tios").


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Volumen 22 (2005)
ISSN: 1139-8736