En este capítulo describimos el conjunto de reglas de transcripción que generan el DEFE, agrupadas por módulos:

(1) Reglas de transcripción grafema-fonema.

(2) Reglas de silabación.

(3) Reglas de ajuste silábico.

(4) Reglas de acentuación.

(5) Reglas de transcripción fonema-alófono.

    Incluimos el módulo de presilabación, para el tratamiento de los hiatos no marcados ortográficamente, y el de Reglas de fonetización sintáctica, destinado a la aplicación del DEFE en la fonetización de textos. Asimismo, indicaremos todos aquellos aspectos lingüísticos necesarios para el diseño de las reglas.

    Primero describiremos los módulos de reglas de aplicación regular en todo el léxico: FON1, FON2, FON3, FON4, FON5 y FON6; después, el de las Reglas de fonetización sintáctica (las operaciones que se realizan en este módulo se relacionan con las de FON2 y FON6). Finalizaremos describiendo la presilabación; aunque sea el primer paso en la generación del DEFE, afecta a un subgrupo de palabras y resuelve una anomalía del sistema ortográfico del español: se marca la división silábica no deducible de la ortografía.

6.1.1. Interpretación fonémica del alfabeto español.

    El alfabeto establecido por la Real Academia en la ordenación del Diccionario de la Lengua Española, desde su cuarta edición (1803) hasta la actualidad (vigésima primera edición, 1992) consta de 29 letras:

    Este alfabeto oficial no ha estado exento de controversia (cf. Seco, 1986, s.v. "ch"). La Academia, siguiendo un criterio fónico, considera como letras los dígrafos ch y ll (letras che y elle), representaciones de las consonantes palatal africada sorda // y palatal lateral //, respectivamente (cf. RAE, 1975: 133). Por ese mismo criterio, evidentemente, también debería considerarse como letra la rr, representación de la alveolar vibrante múltiple /r/ intervocálica en posición interior de palabra, y separar como letras independientes la c que representa la velar oclusiva sorda /k/ de la c que representa la interdental fricativa sorda //, como hizo la Academia en el Diccionario de Autoridades (RAE, 1726-1739) y en las tres primeras ediciones del diccionario vulgar.

    Cada regla de FON1 se ha de referir a un grafema, puesto que el formato indica la transcripción de un signo ortográfico inicial; aunque varias reglas puedan estar asociadas para dar cuenta de un mismo fenómeno, por ejemplo, la trascripción de un dígrafo en un fonema, cada una de ellas se referirá a un solo signo.

Por tanto, en este trabajo consideraremos que el alfabeto del español consta de 27 letras:

    a, b, c, d, e, f, g, h, i, j , k, l, m, n, ñ, o, p, q, r, s, t, u, v, w, x, y, z,

que solas o combinadas entre ellas formando grupos grafemáticos representan el conjunto de fonemas de la lengua española. La discrepancia de ambas cifras es el resultado del conjunto de irregularidades en la relación grafema-fonema del español. En la siguiente tabla indicamos la interpretación fonémica de los grafemas.

Tabla 49: Interpretación fonémica del alfabeto español.