ISSN: 1139-8736
Depósito
Legal: B-18009-99
Durante el
segundo cuatrimestre del curso
1994-95, asistí como oyente a una
asignatura del plan de
estudios entonces recién implantado:
Cuestiones del
español como segunda lengua. Había
finalizado
mi licenciatura en Filología Española por la
Universitat
de Barcelona el curso anterior, y en esos momentos alternaba
los
estudios de Filología Portuguesa con una beca de
colaboración
en el Aula de Informática y con las clases de
español
para extranjeros que impartía desde el segundo
año
de estudiante en la Facultad. Conocedora de mi
interés
por esta aplicación de la filología, la
profesora
responsable de aquella asignatura, la Dra. Martinell, me
había
invitado a asistir a sus clases. Los temas ahí
tratados
me resultaron altamente enriquecedores, entre otras razones
porque
no existía ninguna asignatura de este tipo en el
anterior
plan de estudios y, por lo tanto, la formación que
había
adquirido hasta entonces en ese campo no procedía
directamente
de las aulas. Junto a la información teórica
que
la profesora proporcionaba a los estudiantes de Cuestiones
del
español como segunda lengua, ofrecía también
unas
sesiones prácticas complementarias en las que los
estudiantes
extranjeros exponían sus propias experiencias
como aprendices de
español, tratando de ver cómo
su lengua materna dificultaba o
facilitaba su adquisición
del español. Estas sesiones
despertaron un gran interés
en todos los estudiantes interesados en
la adquisición
de segundas lenguas, y a raíz de esas sesiones
prácticas
pensamos que quizá también podría
ayudar
en el estudio de los procesos de aprendizaje del español
como
segunda lengua una información que yo venía
recogiendo desde
hacía unos meses: las conversaciones de
un grupo de personas que, a
través de la red Internet,
debatían cuestiones referentes a
la enseñanza del
español a
extranjeros.
Como becaria del Aula de
Informática
de la Facultad de Filología, había tenido
la oportunidad
no solo de manejar entornos operativos y aplicaciones, sino
también
de adentrarme en el mundo de la Internet. Un poco antes de
que
las noticias sobre este universo de telecomunicaciones invadieran
los
medios de comunicación, los becarios del Aula de
Informática
disponíamos ya de una cuenta de correo
electrónico,
pues el director del Aula de Informática era
perfectamente
consciente de que la mejor manera de que empezáramos
a
curiosear, es decir, a aprender el funcionamiento de la Internet
era
proporcionarnos una dirección electrónica. Al
principio no
sabíamos qué hacer con ella, pero en
un boletín de
ASELE -Asociación de Español
Lengua Extranjera-1 se publicó
una reseña sobre
ESPAN-L. Esta denominación correspondía
a un grupo de
personas que, a través del correo electrónico,
debatía
cuestiones relacionadas con la enseñanza
del español como
segunda lengua, y pensé que no
podía dejar pasar la
oportunidad de conocer este nuevo
sistema de trabajo e
investigación. Fue así como,
hace ya dos años y
medio2,
accedí por primera vez a un
foro de debate o lista
de
conversación.
Actualmente participan
en ESPAN-L cuatrocientas
personas interesadas en la enseñanza del
español
como segunda lengua, aunque no todos los participantes son
hablantes
nativos de esta lengua. A pesar de que no disponemos de una
relación
del país de origen de cada uno de ellos, sí
es posible
indicar desde dónde intervienen, es decir, en
qué
países trabajan, unos como investigadores y otros
como
profesores de lengua o literatura españolas. Estos
países
son, por orden alfabético: Alemania, Arabia
Saudí,
Argentina, Australia, Austria, Brasil, Canadá, Chile,
Colombia,
Corea, Costa Rica, España, Estados Unidos, Francia,
Gran
Bretaña, Holanda, Hungría, Islandia, Israel,
Japón,
Méjico, Noruega, Perú, Polonia, Rusia,
Sudáfrica,
Suecia, Suiza, Tailandia, Taiwán, Uruguay y
Yugoslavia.
Esta diversidad -un total de 32 países- constituye
uno
de los principales atractivos de un foro de debate. En
el
Anexo 1 puede consultarse la relación completa
de los
miembros de ESPAN-L en julio de 1995 y en mayo de 1997,
clasificados en
función de los países desde donde
acceden o accedían a
la Internet.
Respecto a la lengua de
comunicación
entre personas de nacionalidades tan diversas, debe
destacarse
que, en principio, no hay ninguna lengua oficial para la
correspondencia
de ESPAN-L, cuestión que amplía las fronteras
de
este foro pero que también ha acarreado
algún
problema. En un primer momento, las conversaciones se
mantuvieron
en español; a continuación se empezó a
utilizar
el inglés como lengua franca, sobre todo debido a la
entrada
en el foro de un gran número de personas
residentes
en los Estados Unidos -actualmente, más de la mitad
de
los miembros reside en este país-, hasta que llegó
un
momento en el que la coordinadora del foro tuvo que
intervenir para
pedir a los participantes que trataran de escribir
en una lengua que todos
pudieran entender y, puesto que el tema
sobre el que se debatía era
la enseñanza de español
como lengua extranjera, era de
suponer que nadie tendría
problemas para comprender el
español. Esta llamada a utilizar
la lengua que se enseña como
lengua de comunicación
en ESPAN-L provocó reacciones en
contra por parte una minoría
de miembros del foro, pero en
estos momentos es esta la
lengua en la que se establece la correspondencia
en este foro.
El tema principal de
conversación de
ESPAN-L, el español como lengua extranjera,
provoca debates
muy diversos sobre lexicología,
sociolingüística,
pragmática, gramática
normativa, traducción,
etcétera. También se
intercambian opiniones sobre
diferentes metodologías y manuales para
la didácticade
lenguas, y sobre bibliografía útil para
la formación
del profesorado. Asimismo, a través de la lista
se informa
de cursos dirigidos a profesores o a estudiantes, de
congresos,
y de plazas en universidades o escuelas que solicitan
profesores
de español. También, desde luego, ESPAN-L es
el
lugar ideal para dar a conocer todo tipo de aplicaciones de
las
tecnologías a la enseñanza del español:
información
sobre programas multimedia o interactivos para el
autoaprendizaje
del español -programas para practicar la
conjugación
de los verbos, por ejemplo-, diccionarios existentes en
formato
CD-Rom y, por supuesto, cualquier dato que relacione la
Internet
con la enseñanza del español, de modo que la
mayoría
de las direcciones que figuran en el Anexo 2 procede
directa
o indirectamente de ESPAN-L. También se habla en ESPAN-L
de
la literatura de los países hispanohablantes, de sus
costumbres o de
su historia, aunque los participantes deben procurar
limitarse a cuestiones
aplicables a la enseñanza del español,
pues existen otros
foros que giran en torno a esos
temas3.
Toda la
información que se mueve por
ESPAN-L muestra un nuevo sistema de
trabajo que facilita el intercambio
de experiencias y opiniones con colegas
que trabajan en lugares
muy diferentes y que, por lo tanto, se encuentran
ante situaciones
muy diversas en las clases de español como L2.
Además,
un foro de este tipo permite averiguar si los
lingüistas
de otros países disponen de la misma
formación y
del mismo material de apoyo que se utiliza en
España.
Fue por todo ello por lo que
decidí
hablar de ESPAN-L a la profesora de Cuestiones del
español
como segunda lengua, quien no solo se mostró
interesada
por el tema, sino que me invitó a analizar más
pormenorizadamente
esta lista de conversación4
, y también a publicar en el
boletín número
13 de ASELE5
una reseña
titulada «Más sobre ESPAN-L» en la que
animaba
a los miembros de esta asociación a participar en el
foro
, a la vez que anunciaba el inicio de la
investigación
cuyos resultados hoy
ofrecemos.
Es preciso señalar que,
durante el período
de preparación del presente trabajo, tanto
la red Internet
como nuestra visión de la misma han evolucionado. En
primer
lugar, la Internet ha pasado de ser una herramienta empleada
por
sectores muy limitados a ser el tema de charla de numerosas
personas
que tienen acceso a esta red desde su propio domicilio. Al
mismo
tiempo, se han creado o difundido recursos que, en muchos casos,
han
eclipsado el correo electrónico y los foros
de debate como
ESPAN-L; nos referimos, principalmente, a la World
Wide
Web.
Por todo ello parece preciso comenzar
repasando
brevemente algunas de las posibilidades que ofrece la
Internet,
con el fin de delimitar el objeto de estudio de este trabajo
de
investigación; por eso se dedicará el
Capítulo
26 a tratar de
describir desde
la perspectiva del usuario, es decir, no como lo
haría
un técnico informático, en qué
consisten
la Internet y algunas de sus aplicaciones, como el correo
electrónico,
los foros de debate y otras que no van a ser
analizadas
directamente en este trabajo aunque, inevitablemente,
serán
mencionadas en algún momento, como la World Wide
Web.
Se indicaba más arriba que no
solo ha
evolucionado la Internet, sino también nuestra
visión
de la red y, concretamente, de los foros de debate; y
es
que, como es sabido, la ampliaciónde los conocimientos
sobre
cualquier materia modifica la visión que sobre ella
se tenía
inicialmente. En estos momentos participo en cinco
foros, cada uno
de los cuales presenta características
específicas: ESPAN-L,
SPANGLISH -que se centra en el análisis
lingüístico de
los tecnicismos informáticos,
muy influidos por la lengua inglesa-,
APUNTES -coordinado por
el Departamento de Español Urgente de la
Agencia EFE y
donde se discuten cuestiones normativas referentes a la
lengua
española-, INFOLING-L -donde, junto con los
profesores
Eulalia de Bobes, Emma Martinell y Carlos Subirats,
difundimos
todo tipo de información relacionada con la lengua
española-
y el Fòrum Telemàtic de la Universitat de
Barcelona
-que tiene como objetivo debatir sobre la docencia
universitaria-.
Asimismo, tengo conocimiento de las conversaciones que se
mantienen
en un sexto foro, FLTEACH, dedicado a la
enseñanza
de segundas lenguas, aunque no participo en él. En
FLTEACH
se plantean con frecuencia consultas sobre el español
como
segunda lengua, y en APUNTES se habla sobre la lengua
española
desde la perspectiva de la norma gramatical; por esta
razón
hemos considerado conveniente titular este trabajo
ESPAN-L,
un "foro de debate" en la Internet sobre la lengua
española,
para insistir en que no es el único que se
ocupa de ello.
La decisión de centrarnos
en un foro
de debate como ESPAN-L responde a la necesidad de
seleccionar,
aunque esto no signifique que ESPAN-L sea más
importante
desde el punto de vista filológico que otros
foros,
ni que los foros presenten más interés
que
otras aplicaciones de la Internet como, por ejemplo, la World
Wide
Web. De ahí que consideremos necesario constatar
en el
Capítulo 2 que existen otros muchos usos de
la Internet,
además de ESPAN-L, cuya relación con
el estudio del lenguaje
debería ser analizada en un trabajo
posterior más
amplio.
Una vez descrita la escena en la que se
encuentran
las aplicaciones de la Internet, se procederá en el
Capítulo
3 a la descripción del foro ESPAN-L,
un canal
informático de intercambio de información relativa
a
la enseñanza y el aprendizaje del
español.
A continuación, en el
Capítulo
4 se comentarán, como muestra representativa
del funcionamiento
de ESPAN-L, algunas conversaciones que se mantuvieron en
este
foro entre los meses de marzo y mayo de 1995. Para proceder
a
este análisis, se clasificaron los cerca de mil
cuatrocientos
mensajes7 de esos tres meses
según
los temas en ellos tratados, que reunimos en los apartados
de:
gramática, pragmática, informática,
material
-tanto para el profesor como para el aprendiz-,
didáctica
-actividades o metodologías-, traducción,
cursos
y congresos, y ofertas de empleo, y en todos estos grupos se
distinguió
entre los mensajes en los que se planteaba una consulta y
aquellos
cuyo objetivo era distribuir una información.
Lógicamente,
a muchos mensajes les correspondía estar en
más
de uno de los mencionados grupos, por lo que se imprimieron
todas
las veces precisas y se colocaron en todos los apartados de los
temas
correspondientes.
En un principio, se
optó por comenzar
por el análisis de los mensajes en los que
se planteaban
consultas gramaticales, con la intención de proseguir
con
las demás consultas y, posteriormente, proceder al
análisis
de los mensajes en los que, en lugar de plantear una
consulta,
el listero simplemente informaba, es decir,
difundía
una información.
Conforme se describían las consultas
gramaticales planteadas en
ESPAN-L entre marzo y mayo de 1995,
nos encontramos ante la necesidad
ineludible de intervenir de
un modo crítico y filológico,
aportando referencias
bibliográficas sobre los temas que se
debatían en
el foro. A este respecto, se adelanta que las
consultas
que se describen en el apartado 4.1 de este trabajo
están
relacionadas con campos muy diversos del estudio de la
lengua
española, por lo que no se pretende aportar una
bibliografía
exhaustiva para todos o cada uno de ellos sino, como se
indica,
intervenir como estudiosos de la lengua española.
Somos
conscientes del peligro de dispersión que presenta un
objeto
de estudio tan amplio, pero también de que el estudio
general
de los fenómenos proporciona una visión
más
próxima a la realidad.
Con
todo ello, esta primera fase del estudio
de los mensajes de ESPAN-L ha
resultado más extensa de
lo previsto inicialmente, por lo que ha
sido preciso replantear
el trabajo y reducir el ámbito de
análisis, de modo
que el comentario de los mensajes se limita
actualmente a aquellos
en los que se plantearon consultas
gramaticales.
En el apartado 4.2 se
presentan las
conclusiones a las que ha conducido el análisis de
los
doscientos treinta y seis mensajes que constituyen las
veintitrés
conversaciones sobre temas gramaticales desarrolladas en
ESPAN-L
entre marzo y mayo de 1995.
A pesar de
comprender la necesidad de reducir
el campo de estudio proyectado
inicialmente, no nos ha parecido
adecuado prescindir de una valiosa
información que se desprende
de uno de los grupos de mensajes
ignorados: las referencias bibliográficas,
más concretamente,
los manuales o métodos para la
enseñanza del español
para extranjeros empleados
por los miembros de ESPAN-L. Por este motivo, se
dedica el Capítulo
5 de este trabajo a presentar brevemente
los títulos
recogidos, sobre los que se ha iniciado un
análisis sobre
el conocimiento o desconocimiento, entre
España y los Estados
Unidos, de los textos empleados en ambos
países. La información
recopilada se ha organizado en una
base de datos en la que figura
la información sobre los manuales,
sobre los profesores,
y sobre la opinión de estos respecto a
aquellos. Todo ello
será descrito en el Capítulo 5,
que se complementa
con el Anexo 3, donde se reproducen los mensajes
que han
servido de base para este estudio comparativo: un
cuestionario
enviado a los miembros de ESPAN-L y FLTEACH, y las
respuestas
recibidas.
Como se ha indicado, el
análisis de
ESPAN-L tenía que ser, en un principio, el eje
fundamental
sobre el que iba a tratar el presente estudio; pero
enseguida
vimos que existe un tema paralelo que es imposible soslayar,
por
mucho que sea preciso centrar la atención en un tema, dada
la
extensión que caracteriza una investigación de
este tipo. Nos
referimos a la terminología específica
que, a raíz de
la difusión de la Internet, se está
propagando a
través de los medios de comunicación,
hasta el punto de que
resulta casi imposible hablar de la Internet
sin emplear dichos
términos. Disponemos de una relación
de cerca de
cuatrocientas palabras y expresiones que se emplean
para hablar en
español sobre la Internet, por lo que nos
ha parecido interesante
incluir dicho glosario de términos
específicos en el Anexo
4, y presentarlos brevemente
en el Capítulo 6, a partir
de los procesos de formación
léxica mediante los cuales se ha
creado este lenguaje especial
que está abriéndose camino
entre los internautas
que hablan español. Hemos concebido el
Capítulo
6 más como un anexo que como un
capítulo propiamente
dicho, pero lo incluimos en el Volumen I
porque en él
se apuntan, aunque de un modo muy general, algunas
reflexiones
teóricas, lo que no ocurre en las páginas del
Volumen
II.
Tras todo ello se
expondrán, en el Capítulo
7, las conclusiones finales
a las que ha conducido esta tesis
de
licenciatura.
A continuación se
ofrecerá, en
el Capítulo 8, una relación
bibliográfica
que incluye los textos consultados para la
elaboración
de esta memoria de licenciatura, citados o no a lo largo
de estas
páginas, y también otros textos complementarios.
En
este capítulo se encontrarán referencias a escritos
sobre
prácticamente todos los aspectos de la filología
junto a
trabajos sobre las nuevas tecnologías, por lo que
para facilitar la
consulta de esta bibliografía tan diversa
se ofrece en dos bloques:
las monografías y los trabajos
incluidos en una obra o revista. En
las monografías se
indica, tras el autor, el año de la
primera edición
entre paréntesis, y en último lugar el
año
de la edición que hemos manejado, de modo que cuando a
lo
largo de este trabajo se remita a una de dichas obras se
indicarán
también las dos fechas. Si en algún caso no
nos
consta con seguridad el año de la primera edición,
se
indicará en la bibliografía solo el de la edición
que
se ha consultado. En el apartado de
«Artículos»
se recogen numerosos trabajos sobre
la Internet aparecidos en
la prensa nacional e internacional, que hemos
obtenido gracias,
en gran medida, a la ayuda que se nos brindó en el
Servei
de Documentació de La
Vanguardia.
Finalmente, en los
volúmenes II y III
se incluyen los Anexos a los que se
irá aludiendo
a lo largo de este trabajo y que confiamos en que no
dificulten
excesivamente la lectura de este trabajo, sino que, por el
contrario,
justifiquen y enriquezcan algunas de las reflexiones que en
él
se plantean.
Se recordaba hace un
momento que la ampliación
de los conocimientos sobre un tema
modifica la visión que
de ellos se tenía inicialmente, y eso
es lo que nos ha
ocurrido en la elaboración de esta tesis de
licenciatura,
en la que, como se ve, se han ido multiplicando los enfoques
para
el estudio de la lengua española en la
Internet.
Las páginas siguientes
reproducen solo
algunos de los resultados obtenidos hasta ahora a modo de
anuncio
de lo que desearíamos que fuera un estudio posterior
mucho
más exhaustivo sobre la presencia de la lengua
española
en la Internet. No se alude, por ejemplo, a las muchas
utilidades
de la Internet aplicables a la enseñanza del
español
a extranjeros -el correo electrónico o la
World
Wide Web, además de los foros de debate-,
campo
sobre el que también hemos trabajado durante los
últimos
dos años8.
También
debería desarrollarse
con mayor atención en un estudio
posterior el análisis
de la Internet como medio de
comunicación y fenómeno
sociológico que, sin duda,
marcará el cambio de
milenio9.
1.
Boletín nº 11, noviembre de 1994,
página
52.
2.
Pertenezco a ESPAN-L desde enero de 1995.
3. En el mencionado Anexo 2 figuran las direcciones
de foros sobre
la literatura, el arte y otras manifestaciones
de la cultura de
países hispanohablantes.
4. El
trabajo ESPAN-L, un "foro de debate"
en la Internet sobre la
lengua española , bajo la dirección
de la Dra. Emma
Martinell Gifre, constituyó mi tesis de
licenciatura, defendida en
la Universidad de Barcelona en junio
de 1997.
5. Noviembre de 1995, página 51.
6. A lo
largo de la presente tesis de licenciatura, cuando
se remita a un apartado
que figure en el índice, no se
indicarán las páginas
en las que se encuentra, pues
pueden consultarse
ahí.
7.
Concretamente, mil trescientos noventa y cinco:
quinientos
uno de abril y cuatrocientos cuarenta y siete tanto de marzo
como
de mayo.
8.
A este respecto pueden consultarse E. MARTINELL
GIFRE
y M. CRUZ PIÑOL [1996], D. MIGHETTO [1996] o M. CRUZ
PIÑOL
[1997], y también los trabajos de A.CAÑAS
CAMPO,
M.CRUZ PIÑOL y F.REY en las Actas del Congreso
Asiático
Internacional de Hispanistas, los de M.CRUZ
PIÑOL y
de R. y D. SITMAN, en las Actas del VII Congreso
Internacional
de ASELE, los de M.CRUZ PIÑOL y E.MONDELO
-T.RODRíGUEZ,
en las Actas del Congreso sobre La Lengua y los
Medios de Comunicación,
y el de POYATOS, C. en las Actas del
II Congreso Nacional de
Usuarios de Internet e
Infovía.
9. Sobre lo que puede consultarse,
por ejemplo, J. D. BOLTER
[1991], P. LÉVY [1987], D. LOCKE
[1997], N. NEGROPONTE
[1995] y S. TURKLE
[1995].
ISSN: 1139-8736
Depósito Legal: B-18009-99
(la dirección de este
documento es http://elies.rediris.es/elies1/1.htm)